Carvajal, en hibernación

Las ventas cayeron más de 10% en dólares en el primer semestre, pero el control en gastos y costos, y una reducción en los precios de las materias primas, le permitieron mejorar su margen operacional.

El primer semestre fue más difícil de lo que pensaban las directivas de Carvajal. A pesar de haber modificado a la baja las expectativas de crecimiento a principios de año, cuando se vislumbraban los efectos de la crisis provocada por el descalabro de los créditos subprime en Estados Unidos, no se lograron cumplir los presupuestos de ventas. El Grupo pensaba crecer 2% en dólares, pero la realidad es que tuvo una caída superior al 10%. Para Ricardo Obregón, presidente de Carvajal, la explicación está en dos factores: la volatilidad de la tasa de cambio y la caída en la demanda.

Carvajal es el grupo con mayor grado de internacionalización del país, y esto ha obrado en su contra en la coyuntura actual. Tiene operación directa en 18 países y el 47% de las ventas de la organización proviene del exterior, por lo que su moneda de referencia es el dólar, que ha tenido fuertes oscilaciones en prácticamente todos los mercados donde se encuentra.

"Lo que más duro nos ha dado es la volatilidad de las tasas de cambio porque tenemos operaciones en muchos países donde las monedas se han visto afectadas y han tenido ires y venires complicados. En Brasil, la tasa estaba muy por encima de 2 reales por dólar el año pasado, cuando hicimos presupuesto, no pensábamos en una tasa de cambio como la de ahora (1,87 a 31 de julio). En Venezuela, la tasa está en 6,85 bolívares por dólar y la presupuestamos a 3,80. Con esas volatilidades es difícil hacer planeación de los negocios", afirma Obregón.

Los principales negocios de Carvajal están en la industria papelera y editorial, empaques, directorios telefónicos, muebles de oficina y servicios de tercerización. Y, como dice Obregón, con excepción de empaques y outsourcing, todo se ha afectado. En papel, el precio internacional ha caído más del 20%, por lo que Propal ha enfrentado una coyuntura difícil. En Mepal la desaceleración en la venta de muebles de oficina se ha compensado con la línea de dotación de bodegas. Assenda se ha beneficiado de la crisis, en la medida en que en estas épocas las empresas acuden más a la tercerización.

A pesar de la caída en las ventas, el grupo logró mejorar su resultado operacional, gracias a una política de reducción de gastos y costos y al descenso en los precios de materias primas, como el petróleo. El margen operacional anualizado pasó del 6% al 8%, "producto de la estrategia de hibernar", explica Obregón.

El grupo espera que 2009 termine con un mayor dinamismo en las ventas, aunque considera que no va a ser suficiente para compensar la caída del primer semestre. La directriz es enfocarse en volver más eficientes las compañías y prepararlas para cuando haya una reacción en la demanda. Mientras tanto, está preparando una emisión de bonos para refinanciar la deuda.

Con tecnología biométrica se realizó proceso de elecciones de alcalde en Jamundí, Valle del Cauca

La Registraduría Nacional del Estado Civil terminó exitosamente la identificación ciudadana mediante la toma de huella dactilar electrónica, que logra evitar el fraude de votos.

El proceso se realiza a través de tecnología biométrica gestionada por Assenda, empresa de la Organización Carvajal especializada en mejorar la competitividad de las compañías a través de soluciones en modalidad BPO.

La entidad estatal acudió a la avanzada tecnología de Assenda para lograr la identificación exacta de cada ciudadano e impedir así la suplantación o duplicidad en votos; garantizando de esta forma la transparencia del proceso electoral, que se realizó durante el 5 de julio.

En el municipio se instalaron 160 mesas en 29 puestos de votación, donde 30.473 personas, un 39 por ciento de participación ciudadana, eligieron a Jorge Eliécer Aragón Mafla como nuevo alcalde.

El director de la Vertical Gobierno de Assenda, Víctor Muñoz, dijo que "El tiempo que nos tomamos identificando a un ciudadano a través de su huella dactilar es de pocos segundos y para el ciudadano es un proceso totalmente sencillo y muy confiable, pues tiene la tranquilidad de que nadie va a votar en su nombre".

La empresa de la Organización Carvajal aspira a que la tecnología de biometría sea utilizada en futuros procesos estatales y empresariales. Assenda, también ofrece soluciones de BPO en los sectores Financiero, Salud, Comercio y Consumo Masivo. Opera en Colombia, México, Panamá, Venezuela, Ecuador, Perú y Argentina.

El potencial de la tercerización

La meta del sector es estar prestando el 5% de los servicios en inglés para 2012. Grupos como Carvajal ya le están apostando a prestar servicios de BPO.

El giro estratégico que le ha dado el grupo Carvajal, en los últimos tres años, a negocios tradicionales como el suministro de productos impresos de seguridad y de equipos de oficina; los servicios de call center y la industria gráfica es el mejor ejemplo del potencial que le ve el sector privado a la tercerización de procesos.

En 2007, Carvajal entendió que el auge de las tecnologías de la información era un peligro inminente para negocios liderados durante años por el grupo. Productos tradicionales como los cheques, los tiquetes aéreos y las mismas facturas, están siendo rápidamente sustituidos por servicios electrónicos y, aunque puede que no desaparezcan, con el tiempo dejarán de ser una fuente de crecimiento para la empresa. Algo similar sucede con los servicios de impresión, mientras que los servicios de call center, en particular los de voz básica, se han convertido en un commoditie.

Esto llevó al grupo a transformar los negocios que estaban dedicados a estas actividades y a enfocarlos cada vez más en la prestación de servicios tercerizados a distancia, o BPO&O (por sus siglas en inglés Business Process Outsourcing & Offshoring), que tienen un gran potencial de crecimiento, no solo en Colombia, sino en el mundo (ver recuadro).

Así como lo hizo Carvajal, el Gobierno espera que otras compañías aprovechen las fortalezas que tiene Colombia en la prestación de servicios de BPO&O, para que este sector se convierta en la punta de lanza de la transformación productiva del país y, por esta vía, en una de las principales fuentes de crecimiento de las exportaciones para los próximos 23 años.

De acuerdo con un estudio de la consultora McKinsey & Co., el BPO&O es un sector de rápido crecimiento, que pasará de vender en el mundo US$ 18.000 millones en 2007, a US$ 113.000 millones en 2012; y, de estos, US$ 90.000 millones estarán libres para ser capturados por nuevos jugadores, generando oportunidades importantes para los países emergentes.

Más que call centers


En Colombia, el sector de BPO se encuentra concentrado principalmente en contact centers, que vienen creciendo en promedio al 40% durante los últimos cuatro años. De acuerdo con la Asociación Colombiana de Call Centers, entre el 17-18% de las ventas corresponden a exportaciones. "En el largo plazo, los porcentajes tienen que invertirse. La facturación nacional se tiene que volver el 20%, porque, si no, el sector solo crecerá a ritmos de 4% y 5%", explica Carlos Aparicio, director ejecutivo de la asociación.

El mercado objetivo en el corto plazo es España y, a más largo plazo, el mercado angloparlante. En el primer caso, una desventaja es la falta de homologación de la ley de habeas data ante la Comunidad Europea, ya que España es muy estricta en la protección de las bases de datos de sus ciudadanos. Sin embargo, aunque todavía no están homologadas, se ha avanzado en la explicación de las normas colombianas y este obstáculo podría estar en camino de desaparecer. En el segundo caso, el problema radica en que el personal bilingüe no es suficiente para atender una gran demanda de servicios en inglés.

Sin embargo, el potencial de Colombia es enorme, como lo reconocen las multinacionales que se han instalado en el país. "Colombia es uno de los países de Latinoamérica que más fuerte apuesta por la educación y la formación universitaria de sus jóvenes, nos hemos encontrado con gente con una formación excelente para los servicios BPO, bilingües, con altos conocimientos informáticos y preparados para adaptarse a las últimas tecnologías", explica Maritza Garzón, directora general Región Andina de Digitex. "Nuestro reto está en atender clientes con operaciones regionales en formato off shore desde Colombia, continuar creciendo con empresas multinacionales españolas y llegar de manera proactiva a los mercados de los Estados Unidos y México. Nuestras inversiones para 2009 superarán los $10.000 millones, doblando la inversión de 2008", explica.

Por su parte, Contact Center Américas está contemplando la posibilidad de prestar servicios en inglés a partir del próximo año. "Entendemos que la oferta de personas con nivel de inglés aceptable para tener esta operación es escasa; sin embargo, existen dos contact center que lo hacen en el país", explica Jorge Enrique Cote, gerente general de la empresa.

La meta del sector para 2012 es estar prestando el 5% de los servicios en inglés (actualmente representan el 2%) y aumentar la proporción de servicios de datos básicos y datos con parámetros definidos. En cifras, esto se traducirá en alrededor de US$1.600 millones adicionales en ingresos, señala un estudio del Ministerio de Comercio.

Aunque los servicios más conocidos de BPO son los de call center, hay otros sectores que tienen un gran potencial de crecimiento. Por ejemplo, la organización Serdan, que reúne diez compañías, entre las que se encuentran Serdan S.A., Misión Temporal S.A., Expertos Servicios especializados Ltda., Vigilancia y Seguridad Vise Ltda. , ofrece BPOs en temas tan diversos como macroprocesos en recursos humanos, servicios generales, servicios de back office, servicios en seguridad y vigilancia y operaciones logísticas. Esta organización, que es intensiva en mano de obra (tiene 22.000 empleados), es una muestra de cómo la tercerización va más allá de los servicios de voz. "Las compañías quieren focalizarse en lo que es su negocio y, en épocas de crisis, buscan tercerizar lo que no es estratégico para ellas", afirma José María Ruiz DíazGranados, gerente general de la Organización Serdan.

La tercerización de servicios a distancia es una oportunidad para desarrollar una nueva línea de negocios a tono con las tendencias mundiales y así ayudar a dinamizar las exportaciones del país. Gobierno y sector privado tienen que aprovechar las oportunidades que se abren.

Subsidio a pobres enfrenta a la banca; existe interés por el manejo de cuentas de bajo monto

El negocio que se ganó por licitación el Banco Agrario en unión temporal con Assenda del grupo Carvajal para entregar subsidios del programa Familias en Acción en junio, tiene malhumorados a algunos.

¿La razón? La entrega de los recursos a los colombianos más pobres, no solo les hubiera dejado ingresos importantes por concepto de comisiones, sino que les abriría la oportunidad de conquistar a un número importante de nuevos clientes o, lo que es lo mismo, bancarizarlos.

Para seguir en el negocio de desembolsar la plata a familias pobres, algunos banqueros tenían la esperanza de que se abriera una nueva licitación. Sin embargo, la directora de ese programa, Rita Combariza, anunció que "esa posibilidad está descartada".


Eso significa que la unión temporal de Banagrario y Assenda mantendrá la exclusividad de entregar tres millones de subsidios a colombianos de bajos recursos y no solo 1'500.000 como creían los banqueros privados.


Hasta el momento hay 2'050.000 familias beneficiarias, pero el Gobierno insiste en que la meta es de tres millones.


La licitación que ganó Banagrario para entregar los subsidios a las familias y bancarizarlas le representará al Estado pagarle a la entidad financiera y a su socia alrededor de 336.000 millones de pesos entre el 2009 y el 2010.


Se calcula que solos los subsidios sumarán cerca de 3,6 billones de pesos en los dos años.


Lucha de precios

En la licitación que el Gobierno llevó a cabo el año pasado para la entrega de las ayudas solo se recibió la propuesta del Banagrario, mientras que los demás bancos se abstuvieron de participar.


Según ellos, los costos serían mucho mayores a los que regían en el 2008 cuando ellos también participaban en el negocio, recibiendo un valor promedio de 8.000 pesos por transacción.


Rita Combariza , directora del programa Familias en Acción, dijo que recibió comunicaciones de algunos de los bancos que entregaban los subsidios por convenio hasta el 2008, en las cuales anunciaban que se abstenían de participar en la licitación y seguir con el negocio, pues los costos de operación subían hasta tres veces el valor que el Gobierno les venía pagando hasta el año pasado.


Según Combariza, los 8.000 pesos mencionados era la tarifa promedio que los bancos le cobraban al Estado por hacer los pagos de los subsidios en años anteriores.


Y es que, en efecto, desde el 2001 existían convenios con siete entidades financieras para que hicieran los pagos a la familias beneficiarias.


En la lista estaban los bancos de Bogotá, Popular, Bancafé (Davivienda), Bbva, Occidente, Bancolombia y el mismo Banagrario, que le cobraban al Estado tarifas diferenciales.


La más baja era la del Banco de Occidente (alrededor de 4.000 pesos) y la más alta, la del Popular (12.000 pesos incluido IVA). El costo promedio era de 8.000 pesos sin IVA y de 9.268 con IVA, según reporte del programa Familias en Acción.


Esos acuerdos no incluían planes de bancarización de las personas, es decir, aperturas de cuentas de ahorro y su alcance era solo para entregar los subsidios.


Una vez los convenios terminaron el 31 de diciembre del 2008, el contrato se le otorgó únicamente a la unión temporal Banagrario-Assenda, que ganó la licitación, con una tarifa de casi 20.000 pesos incluido IVA.


Voceros del Banco Agrario señalaron que si bien ese es valor tope de cada pago, la cifra no se cobra en ningún caso, pues hay niveles diferenciales dependiendo de la región en donde se hagan las operaciones.


En carta enviada en días pasados a PORTAFOLIO en referencia a un editorial publicado por este diario, el presidente del Banco Agrario, David Guerrero, señalaba que "respecto al punto relacionado en su Editorial con el costo de la operación, según el cual el Banco Agrario de Colombia cobra $20.000 por pago, le informamos que ese valor no se cobra en ningún caso, y es importante aclararle que los costos del proceso están establecidos de acuerdo con la zona en donde se efectuará cada pago, diferenciándose entre capitales, municipios intermedios y municipios alejados, y que tal valor corresponde fundamentalmente a los costos de transporte de efectivo, que en buena parte de estos sitios, se realizan por vía área".


Como sea, entre los banqueros privados hay un mal sabor de boca por la manera como -según ellos- el Gobierno habría cambiado las reglas de juego del negocio de entrega de los subsidios de Familias en Acción, especialmente por el pago que reconocería a las entidades financieras por entregar los recursos.


La presidenta de la Asobancaria, María Mercedes Cuéllar, dice que existiría la expectativa de una segunda licitación en la que pudieran participar los demás bancos del país.

"No se cambiaron las reglas"

Según los banqueros, el pago para el Banco Agrario subió de manera sorpresiva de 8.000 a los casi 20.000 pesos en cuestión, sin que existiera explicación para ese cambio.

Rita Combariza dice que las reglas de juego no se modificaron en momento alguno, pues en la licitación no establecía un valor específico para el negocio.


"En los pliegos de licitación no se habló de precio ni de comisión tope", explicó la funcionaria.

Al tiempo que Rita Combariza agregó "Se decía que presentaran ofertas, pero nunca se pusieron precios ni techos. Siempre se dijo que el mercado debía decir cuánto valía la operación".


El caso es que el Banco Agrario y Assenda ya están trabajando en el proceso de bancarización de los colombianos beneficiarios de Familias en Acción, aprovechando la red de 735 oficinas y 228 Corresponsales No Bancarios que tiene la entidad financiera distribuidos en el país y que es la más grande del sistema bancario nacional.